EVOLUCION DEL MERCADO ESPAÑOL DE FERTILIZANTES - AÑO 2007/2008.
El mercado de fertilizantes en el año 2007/2008.
Actualmente nos encontramos en una situación a nivel mundial en que la necesidad de una mayor producción agrícola ha motivado una elevación de los precios de los productos agrícolas y ha llevado a numerosos países a limitar sus exportaciones de medios de producción para garantizar el suministro a sus mercados interiores. En paralelo a la necesidad generalizada de obtener más alimentos, en el mercado internacional se ha producido un importante encarecimiento de las materias primas esenciales en la producción de fertilizantes, especialmente del gas natural, fosfato roca, potasa, azufre, etc., provocando que los fertilizantes hayan experimentado un incremento de precio en todos los mercados.
Las tarifas de gas para la fabricación de fertilizantes en España se han incrementado desde el año 2005 casi un 50 por cien, y la roca fosfórica, que se adquiere principalmente del norte de África, cuesta hoy un 90 por cien por encima de las cifras pagadas por la misma roca hace escasamente un año. Los precios de la potasa en el mercado internacional están experimentando igualmente unas subidas muy importantes. Hay que tener en cuenta que tanto el gas natural como el fosfato roca suponen más del sesenta por cien de los costes de fabricación de los abonos nitrogenados y fosfatados respectivamente.
A nivel nacional, el aumento de los precios de los principales productos agrícolas, el incremento de la superficie de cultivo tras la eliminación del barbecho obligatorio por parte de la Comisión europea y unas condiciones climatológicas favorables han llevado a un incremento de las ventas de fertilizantes durante la pasada campaña 2007/08 (julio-junio), cambiando la tendencia descendente de los últimos años.
La producción nacional de fertilizantes durante el año fertilizante 2007/08 se situó en 4,31 millones de toneladas, experimentando un incremento del 6,3 por cien sobre la producción del año anterior, que fue de 4,06 millones de toneladas, expresada en términos de producto. Dicho incremento fue debido principalmente a una mayor producción de abonos complejos. En dichas producciones se incluyen las cantidades destinadas a otros usos industriales, autoconsumo o transformación como productos intermedios en la fabricación de otros fertilizantes, como es el caso, fundamentalmente, del cloruro potásico, urea, nitratos, sulfato amónico y fosfatos amónicos.
El consumo de fertilizantes durante el último año fertilizante se incrementó un 7 por cien con respecto al año fertilizante anterior, situándose en 5,15 millones de toneladas. Por grupos de productos, las ventas de abonos nitrogenados fueron de 2,37 millones de toneladas, representando el 46 por cien de las ventas totales de fertilizantes, y que junto a las de abonos complejos, con 2,28 millones de toneladas, suponen más del 90 por cien del consumo total de fertilizantes, en la medida que la mayor parte de las aplicaciones de anhídrido fosfórico (P2O5) y potasa (K2O) se realizan a través de los abonos complejos.
Las ventas de abonos fosfatados simples y potásicos simples apenas alcanzan el 10 por cien del volumen total de las ventas con destino directo a la agricultura, con un consumo en el año 2007/2008 de 250.637 toneladas y 245.615 toneladas de producto respectivamente.
Los principales fertilizantes que se consumen en la agricultura española son los abonos complejos ternarios, nitratos y urea, con unos volúmenes durante el último año de 1,77, 0,95 y 0,53 millones de toneladas respectivamente, siguiendo en importancia las ventas de sulfato amónico, con 425.426 toneladas, fosfatos amónicos (355.648 toneladas), soluciones nitrogenadas (227.691 toneladas) y cloruro potásico (201.667 toneladas).
Las importaciones del último año fertilizante fueron de 2,83 millones de toneladas de productos terminados, experimentando un incremento del 10,9 por cien con respecto al año fertilizante anterior. En esta cifra se incluyen productos que se destinan a otros usos industriales. Los fertilizantes de importación destinados directamente a la agricultura vienen a representar, en su conjunto, entre el 40 y el 45 por cien del total de la demanda agrícola interior.
Las exportaciones durante el periodo de referencia aumentaron un 5,9 por cien, alcanzando un volumen de 1,25 millones de toneladas, concentrándose básicamente en el cloruro potásico, sulfato amónico, nitratos amónicos y abonos complejos. Las exportaciones españolas de fertilizantes son demandadas por numerosos países, lo que certifica la calidad de los productos.
El sector de los fertilizantes mantiene y genera un gran número de puestos de trabajo, tanto directamente en sus centros de producción y gestión como en la comercialización, transporte, envasado, minería, fletes, etc., y representa un valor fundamental para el desarrollo agrícola y para el aumento de la competitividad de la agricultura española.
Referencias a la agricultura española del año 2007.
Los últimos datos oficiales sobre la renta agraria en España durante el año 2007 indican unos resultados muy positivos, registrando globalmente un incremento relativo referido en términos monetarios del 9,7 por cien, situando la renta agraria en el entorno de veinticinco mil millones €. Las subvenciones por todos los conceptos contribuyen en esta renta con cerca de 6.700 millones de euros, incluidos 3.389,6 millones de euros que corresponden al "pago único" establecido. Con relación al año anterior las subvenciones aumentaron un 6,2 por cien.
Dentro de la Rama Agraria, la Producción Vegetal aumentó en términos relativos un 12 por cien, alcanzando un valor de 24.346,6 millones de euros y representando el 60,6 por cien de toda la actividad agraria.
Entre los diferentes cultivos que incluye la producción vegetal, destaca el balance positivo de los cereales, con un incremento en valor del 61,2 por cien sobre el obtenido en la campaña anterior, y en menor escala también destacan los incrementos en las producciones de hortalizas, patata y frutas. Sin embargo, la escasez de lluvias durante el segundo semestre del pasado año y la política seguida en la reforma de la PAC sobre los cultivos de remolacha y algodón afectaron muy negativamente en los resultados de los cultivos industriales. En el cómputo de la producción vegetal se contabilizan en el ejercicio 2007 las obtenciones de aceite y vino resultante de la vendimia del año 2006 y la recogida de aceituna en la campaña 2006/07, cuyos resultados no fueron buenos por el descenso del precio del aceite de oliva y la menor producción de uva.
Los bajos precios de los productos cárnicos, las altas cotizaciones de los piensos, y prácticamente sin existencia de otoñada, tuvieron como consecuencia unos resultados negativos para la producción ganadera durante el último año, y ello a pesar de una primavera muy favorable para los pastizales. En relación con el año anterior la producción anual aumentó marginalmente el 1,6 por cien, alcanzando un valor de 14.295,9 millones €.
Los fuertes incrementos de los precios de las materias primas y los productos energéticos, más acentuados en los últimos meses del pasado año, provocaron una subida de los medios de producción, cuyo valor pagado por los agricultores se situó en el conjunto de todos ellos en 16.500,4 millones de euros, correspondiendo a los fertilizantes, según el último avance publicado por el MARM, un valor de 1.332,7 millones de euros, cifra superior en un 13,6 por cien a la correspondiente del año 2006.
Entre los hechos más reseñables para la agricultura durante el año 2007, además del favorable comportamiento de los precios de algunos productos agrícolas, especialmente cereales y girasol, que devolvió cierto optimismo a los agricultores de estos productos, ha sido el planteamiento de la Comisión sobre la nueva reforma de la PAC, presentada como "chequeo médico", y todo lo relacionado con el Desarrollo Rural y la serie de programas que lo contemplan (Marco Nacional de Desarrollo Rural 2007 - 2013 y Ley para el Desarrollo Sostenible del Medio Rural), aprobados durante dicho año.